El rojo y el amarillo combinan bien
Yo nunca he sido de banderas. E incluso odiaba a más de uno que las usaba para alardear ideas políticas de una u otra acera. Pero por fin hoy he dejado de tenerles envidia a los vecinos lusos. Se lo contaba a todo el mundo por entonces.
Como ellos, sin pudor patriotero de ningún tipo engalanaron un país entero, de banderas verdes y rojas en la pasada Eurocopa, que además jugaban en casa.
En el pueblo más remoto del país había una casa, con su bandera en el balcón.
Aquí, 90 minutos han servido para que se quiten los complejos, y al menos por unos días, dos colores y una bandera sean algo que nos une, una muestra de apoyo que jamás antes habíamos visto. Se acabo el pudor. Ahora en mi trayecto hasta casa veo banderas, en balcones, en ventanas o en cafeterías. Y hoy no hay ninguna procesión.
Al final, nos han contagiado la furia. Porque va a ser verdad eso de que ¡PODEMOS!
Como ellos, sin pudor patriotero de ningún tipo engalanaron un país entero, de banderas verdes y rojas en la pasada Eurocopa, que además jugaban en casa.
En el pueblo más remoto del país había una casa, con su bandera en el balcón.
Aquí, 90 minutos han servido para que se quiten los complejos, y al menos por unos días, dos colores y una bandera sean algo que nos une, una muestra de apoyo que jamás antes habíamos visto. Se acabo el pudor. Ahora en mi trayecto hasta casa veo banderas, en balcones, en ventanas o en cafeterías. Y hoy no hay ninguna procesión.
Al final, nos han contagiado la furia. Porque va a ser verdad eso de que ¡PODEMOS!
1 comentarios :
y ademas ganamos haciendo muy buen futbol!!!
bsos para ti y la peque.
anita
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